Tierra del fuego 41

El corresponsal en España dialoga con Yharón Dekel, periodista conductor de «Todas Habladurías» (Cadena Bet, de 10 a 12):

Corresponsal en España:
tebaj,

Yaarón Dekel:
¿Tebaj? ¿»Masacre», en español?

Corresponsal en España:
Sí, masacre. Y es de lo más normal en la prensa, aquí.

Yaarón Dekel:
¿Pero ese término, masacre, su uso, no está circunscripto a un sector espécífico, me refiero a la ideología?

Corresponsal en España:
No, para nada. Vos sabés, Yaarón, los españoles son, en general, partidarios de los palestinos. Te puedo decir que, casi todos se refieren a «masacre» cuando se refieren a la guerra que está llevando a cabo Israel.

Yarón Dekel:
¿Y qué lugar tienen los ataques con cohetes a los que el Hamas nos ha sometido todo este tiempo?

Yaarón, la propaganda del Hamas, en este sentido, nos lleva una enorme ventaja. Están las fotos, esas fotos terribles, que todo el mundo está viendo ahora. Y contra eso, es muy difícil hacer algo.

La obseción israelí son las imágenes que documentan los resultados de las actuaciones del Tsahal: operaciones bélicas, asesinatos selectivos, demoliciones de casas. La destrucción y la muerte siempre son fotografiadas al instante, en minutos las están viendo en todo el mundo, salvo en Israel, que las censura (es una forma de decir, los israeliés tienen internet, tv-cable, satélite). Para «explicar» estas imágenes, Israel despliega en todo el mundo una red de «explicadores», encargados de contar cóm o esas fotos, en realidad son material de propaganda del Terror. No pueden desligarse de la evidencia de que son verdaderas, tomadas en circunstancias que existieron de verdad: un misil que cayó sobre una casa, un buque que disparó sobre una familia que tomaba sol en la playa, una metralla que alcanzó a alguien que iba en busca de agua, o de ayuda. Esta contradicción, que no pueden resolver aunque inviertan fortunas en contra-propaganda, destruye a los israelíes. «esa mentira es verdad, esa verdad es mentira. Les explico…» «La prensa testaruda», tituila una nota del Yediot Ajaronot de, que se ocupa de la cobertura de la operación Plomo Fundido, por parte de la prensa mundial. «No hay diferencia entre izquierda, centro o derecha, todos consideran culpable a Israel. ¿Y los cohetes que nos disparó el Hamas durante ocho años. Ni una palabra. Tampoco, casi nada, de los daños que les inflijimos a la dirigencia del Hamas», concluye en uno de sus párrafos.
Cada vez que Israel hace la guerra, sus políticos y militares se desesperan. No por el enemigo al que enfrentan, sino por su propia imagen que les devuelve un espejo omnipresente.

Deja un comentario